En un nuevo programa de Palabras Sacan Palabras, Andrea Moletto conversó con Rodrigo Bastidas y Jaime Vadell sobre la obra “Aquí me bajo yo” y otros temas de contingencia.
“Aquí me bajo yo”
Con respecto a la obra que ambos protagonizan, Jaime Vadell explicó: “Este señor está aburrido de la vida, encuentra que ya hizo lo que tenía que hacer, cumplió sus deseos y quiere irse. Entonces se enfrenta a la resistencia de la nieta y del hijo, que naturalmente no quieren que se vaya. El cuento se enriquece porque se ve el proceso interior de este suicida frustrado”.
Rodrigo Bastidas agregó desde el punto de vista de su personaje: “Es complejo el tema porque yo como hijo no quiero, porque lo veo lleno de energía, joven, etc. Es como que Jaime hubiese decidido a los 82 años llegar hasta ahí. Estamos hablando de una carrera que la quisiera cualquiera, imagínate que él dijera ‘sabi que me quiero morir, ahora bien, no cuando esté enfermo’. Es complejo el tema y más cuando uno ve a Jaime interpretar magistralmente esta obra y todo el mundo lo aplaude de pie”.
“Cuando él me lo dice en la obra yo le encuentro toda la razón, pero también está esto otro y esa es la gracia que tiene la obra, donde el viejo tiene toda la libertad de decir llego hasta aquí, y que no vengan los hijos a decidir por él”, agregó Bastidas sobre la obra que comienza con sus funciones el 8 de mayo en el Teatro Mori del Parque Arauco. Las entradas están disponibles a través de Ticketmaster.
Envejecer
Sobre el envejecimiento, Jaime Vadell compartió que “para mí no, ha sido un dilema, no sé, no tengo idea, pero algo me sostiene, me gusta vivir, reírme, comer, actuar, eso me sostiene. Haciendo esta obra lo entendí mucho mejor, y el cansancio y el aburrimiento también, porque la vida se va poniendo medio pesada”.
“No me gusta ser viejo, porque no tengo la energía que tenía, porque me canso, porque me cuesta levantarme, acostarme, todo lo que les pasa a los viejos. El cuerpo es el que sufre y te duele y te pesa. A menos que te enfermes de la cabeza que es mucho peor. Estoy enfrentado en este momento a puras situaciones a las que he estado enfrentado en la vida, como decía Borges ‘¿Por qué me voy a morir si no me he muerto nunca?’”, añade el actor.
Política y opinión social
Vadell también habló de los candidatos del oficialismo y por quién votaría: “Por Carolina Tohá. Porque es simpática, es encachada, es chora, me gusta, me cae bien. No me es simpática Jara, me es simpática Carolina nomás”.
“Qué me va a interesar Jaime Mulet, no tengo idea de Winter, lo vi en cuatro fotos del diario, pero parece un hombre serio», agregó respecto a los candidatos de izquierda.
Con respecto a la oposición, dijo: “Ojalá que pierdan todos esos, de repente son peligrosos esos tipos porque está de moda esa tendencia media fascista y de medidas violentas, como el presidente argentino, no me gusta esa cosa que viene un poco de Trump y otras partes del mundo”.
En la misma línea agregó: “Matthei es encantadora como persona, pero no votaría por ella porque me parece que es una persona muy derechista y yo no soy muy derechista, tampoco tan izquierdista pero derechista poco”. Encuentro que Carolina no tiene nada de izquierda, ósea muy poco, no existe ya la izquierda, la tratan de mantener los comunistas”.
Cristián Campos
Con respecto a las denuncias contra Cristian Campos y cómo ha avanzado el caso hasta su eventual sobreseimiento, Rodrigo Bastidas mencionó: “Yo no he querido dar mi opinión porque cuando sales en la radio o un medio arman una batahola que rasguea un tema super delicado. Estoy esperando que la justicia determine lo que corresponde y si yo me junto a almorzar con él, me junto a almorzar con él”.
A esto Jaime Vadell añadió: “Que se acaben estas acusaciones al voleo. Ahí hay una especie de acuerdo de que efectivamente es un degenerado, dejen que los jueces digan y determinen para qué está allí. Es exagerado y feo eso”.
Rodrigo Bastidas añadió que «uno podría decir que uno estaría en las buenas y en las malas, pero en temas delicados como este uno puede optar por una cosa, pero es distinto salir a comer. Hay que resguardar ciertas cosas, porque aquí se faranduliza todo y por eso nunca quise opinar ni decir frases porque las tergiversan».