Noticias

Diputado Jaime Naranjo: ¿Cómo se llama la «técnica» que está realizando?

El diputado Jaime Naranjo dijo: "Tengo un discurso de 1.300 hojas. Hablaré todo el tiempo que sea necesario". Esta "técnica" tiene un curioso nombre.

Naranjo
Agencia UNO

El diputado del Partido Socialista, Jaime Naranjo, lleva horas con una curiosa técnica que lo mantiene hablando hasta lograr que el diputado Giorgio Jackson llegue a la Cámara luego de ser contacto estrecho del candidato Gabriel Boric.

«Tengo un discurso de 1.300 hojas. Hablaré todo el tiempo que sea necesario hasta que Giorgio Jackson esté en la sala», declaró el diputado Jaime Naranjo.

La Sala de la Cámara de Diputados está sesionando para votar la acusación constitucional presentada en contra del Presidente Sebastián Piñera. La oposición no contaría esta jornada con los sufragios suficientes para aprobar la acusación contra el mandatario (78 votos). Esto, debido a la ausencia por Covid-19 de Gabriel Boric y sus contactos estrechos, como Giorgio Jackson.

La idea de Naranjo es para que la sesión se prolongue hasta mañana martes, cuando Jackson ya podrá concurrir al Congreso y votar.

Siendo las 15:17 al momento de escribir esta nota, Naranjo llevaba casi 5 horas exponiendo y llevaba 41 páginas leídas.

Cabe recordar que esta acusación constitucional fue presentada por diputados de oposición en contra del jefe de Estado. Esto, luego de que se revelara la participación de la familia Piñera-Morel en la compraventa del proyecto minero Dominga.

¿Qué es un filibustero?

Filibustear o filibuster es la palabra del momento. Ahora, claramente te podrás estar preguntando: ¿qué significa o qué es un filibustear? Bueno, lo que está haciendo Jaime Naranjo.

Según el sitio web del Senado de Estados Unidos y por lo publicado en Concierto.cl, filibustear o filibuster es:

«un término vagamente definido para una acción diseñada para prolongar el debate y retrasar o prevenir la votación de un proyecto de ley, resolución, enmienda u otra cuestión debatible».

En buen chileno, es un «hacer tiempo». El más largo de la historia del Senado de Estados Unidos duró 24 horas.


Contenido patrocinado

Compartir