PUNTERO FANTASMA

¿Cuál fue el primer equipo en bajar a Segunda?

1954_U_IB_San_Eugenio

Tras un lío fenomenal, en 1952 Rangers de Talca y Palestino fueron los primeros equipos chilenos en ascender formalmente a Primera. Durante 20 años de profesionalismo apenas un equipo había subido -por la ventana- desde la División de Honor Amateur: Iberia. Y otro había bajado: el “Decano” y perpetuo colista de Primera, Santiago National.

La creación de la Segunda División respondió a un viejo anhelo del fútbol chileno. Su estreno supuso la definitiva consolidación de la actividad: por fin los clubes jugarían su destino en cancha, deberían tomar en serio la conformación de los planteles y acabar colista dejaría de ser una anécdota.

En teoría sonaba bonito; en la práctica, el sistema de ascensos y descensos fue una chacra que se prolongó por tres décadas.

De hecho, en 1952 no hubo descenso. En 1953 Thomas Bata de Peñaflor, campeón de Segunda, prefirió no ascender; así Iberia de Conchalí, colista de la División de Honor Profesional, se salvó de los potreros.

O sea, en la nueva estructura del fútbol profesional chileno había ascensos (de vez en cuando y a la maleta) y descensos (sólo en el papel). Un despelote.

1954_Descenso

La Asociación Central de Fútbol decidió terminar con la chacota. Para el torneo de 1954, el último clasificado del torneo de Primera descendería y punto. “El fútbol chileno viene necesitando del ascenso y descenso desde hace muchísimo tiempo… son los dos resortes que habrán de llevarlo al mejor pie de su historia”, saludó la revista Estadio con desmesurado entusiasmo.

Durante ese campeonato pasó lo obvio. Los equipos que se fueron quedando a la cola empezaron a asustarse. Santiago Morning, Everton y el propio Iberia -que había jurado de guata no apelar a ningún resquicio para salvarse esta vez- intentaron a última hora anular el descenso.

En la foto que abre esta nota vemos a los “catalanes” enfrentando en San Eugenio a otro que anduvo bien complicado durante ese torneo: la U. de Chile, penúltima en la fase regular. Al cabo, primó la cordura y las bases por fin se respetaron. Iberia fue colista de la liguilla final y estrenó los descensos a Segunda para abrirle paso al recién fusionado O’Higgins de Rancagua.

Fotos: archivo Estadio.

1954_Iberia_Ascenso


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