Jonny Greenwood cumple 54 y en Futuro lo celebramos con los momentos en que su forma de tocar guitarra —que jamás apuntó a la pirotecnia ni a la masturbación guitarrística— terminó redefiniendo qué significa “solo” en el rock moderno. En un mundo donde el solo era todavía un acto narcisista, Jonny lo devolvió al lugar más hermoso posible. Al servicio de la canción, de la emoción, del subtexto, del glitch, del ruido como poesía. Y por eso mismo, su impacto es distinto: sus solos no “lucen”, sino que hieren. No “brillan”, sino que abren portales.
El músico, que tiene una importante veta como compositor de bandas sonoras con destacados trabajos en películas de Paul Thomas Anderson, ha dicho que “siempre preferí algo que no se prolongara en exceso” y que “odio los solos de guitarra donde escuchas al tipo pensando qué nota viene después”. Por eso, en este especial no se trata solo del más largo o virtuoso solo, sino de los momentos en que su guitarra funciona como voz, como textura, como impulso emocional.
En su cumpleaños, hacemos el ejercicio de elegir 10 de esos latigazos de creatividad pura que —sin gritar— terminaron siendo más revolucionarios que miles de solos “clásicos”. Porque Greenwood no solo tocó guitarra en Radiohead: la repensó. Y de paso, le movió el piso al rock entero.
Just
Una batalla de acordes, según Thom Yorke, entre él y Jonny Greenwood. El solo de guitarra de Greenwood aparece como un estallido de energía al final de la canción, que atraviesa el riff de acompañamiento y le da a la pista un cataclismo emotivo, integrando distorsión pero con inteligencia.
Paranoid Android
Considerado uno de los grandes momentos de guitarra en Radiohead. Jonny Greenwood despliega un solo que combina caos y melodía, es multi-seccional y aporta tensión y liberación en la misma canción.
My Iron Lung
Un solo que destaca también por el tono: Jonny Greenwood usa un DigiTech Whammy + Marshall Shred Master para crear esa textura “glitcheada” característica. Aquí la guitarra no solo acompaña: provoca, cuestiona, empuja.
Go to Sleep
Aquí Jonny Greenwood experimenta con la técnica de guitarra “procesada” (guitarra con efecto de corte-stutter) para crear un efecto inquietante. El solo (o sección de guitarra destacada) enfatiza el ritmo y la textura más que la melodía tradicional.
Bodysnatchers
Una de las guitarras más frenéticas de Radiohead: Jonny Greenwood aporta un riff de motor-rock mezclado con efectos que sacuden la canción. Este momento demuestra que aún en canciones modernas, sigue explorando el instrumento con vigor.
Airbag
Aunque no siempre mencionada como “solazo”, este tema tiene una de las guitarras más ingeniosas de Jonny Greenwood: efectos, texturas, timing. Su intervención aquí ayuda a definir la atmósfera expansiva de «OK Computer».
There, There
En esta canción, la guitarra de Jonny Greenwood construye capa sobre capa: empieza sutil, va ganando intensidad, llega al clímax. Su solo o parte destacada aquí no solo es virtuosismo sino construcción de tensión.
The Bends
Jonny Greenwood aquí aprovecha las posibilidades de su guitarra para definir el sonido de transición de la banda hacia algo más amplio. Su solo es tanto un homenaje al rock como un replanteamiento. Su tono, sus pedales, su enfoque lo evidencian.
Climbing Up the Walls
Aunque la guitarra aquí se mezcla con cuerdas, ambientaciones y efectos, Jonny Greenwood logra que su parte resuene como solo: la mezcla de ruido, melodía y ambientación lo hace inquietante y memorable.
Fake Plastic Trees
Una de las canciones más emotivas del repertorio, donde la guitarra de Greenwood entra con delicadeza, construye melancolía y culmina en un clímax que simboliza el rock alternativo de los ’90. Su solo no es sobre velocidad, sino sobre expresión.
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