Aprender a tocar un instrumento musical es una habilidad que nos acompañará por el resto de la vida, por lo que es buena idea incentivar estas capacidades desde temprana edad. Estudios han demostrado los efectos positivos de desarrollar las competencias musicales en niños, siendo mayores los beneficios mientras antes se estimule el aprendizaje de un instrumento.
La elección del primer instrumento musical puede sonar abrumadora (y cara), pero hay varias formas de simplificar este camino. Aquí algunos consejos para que los pequeños saquen provecho de su primer instrumento y no se frustren en el intento.
Guitarra y Piano: elección segura
Las bases de la música popular moderna están en el piano y la guitarra. La gran mayoría de los músicos suelen tener su primer acercamiento a través de alguno de estos dos instrumentos, y es que además tienen la ventaja de ser muy útiles para componer (a diferencia de otros instrumentos como baterías o bajos).
Gran parte de la música pop o rock actual se puede interpretar con estos instrumentos, lo que hace que su repertorio sea mucho más amplio, con canciones que ofrecen además distintos niveles de dificultad según el nivel de manejo del intérprete. Al mismo tiempo, tablaturas de piano y guitarra son fáciles de conseguir para interpretar canciones sin la necesidad de saber leer partituras.
Si se trata de un piano clásico, el precio es bastante caro, pero los teclados eléctricos o controladores midi ofrecen una alternativa económica, ofreciendo algunos incluso contrapeso en las teclas o pedales de piano para que la experiencia sea más parecida a un piano de cola o uno vertical.
En el caso de la guitarra, por su popularidad se trata de un instrumento muy asequible. Se puede conseguir una guitarra de calidad desde los 30 mil pesos y además es muy probable que en casa haya alguna acumulando polvo por ahí, lista para ser usada.
Otras opciones: Percusiones, cuerdas y vientos
Aunque algo más complicados, hay otros instrumentos que pueden llamar la atención de los jóvenes que demuestren habilidades musicales. Los instrumentos de percusión resultan muy interesantes para aquellos interesados por el ritmo, siendo la batería uno de los más llamativos, aunque existen también el cajón peruano, djembe, bongos y panderos entre otros.
Para aquellos interesados en seguir el ritmo de la música pero con un instrumento más parecido a la guitarra, el bajo es una buena opción. Este instrumento sirve como mediador entre la batería y la guitarra en la mayor parte de la música rock, llevando el ritmo de manera melódica.
En el área de los instrumentos de cuerda, otro que es parecido a la guitarra es el ukelele, siendo más pequeño, transportable y contando con menos cuerdas, lo que puede ser más simple para un principiante.
Constancia y clases
Al momento de aprender un instrumento musical, es importante para el “alumno”, entender una serie de conceptos que le sirvan al momento de interpretar su música. El internet permite a los entusiastas el acceder a clases, tutoriales y lecciones sin salir de su casa haciendo que sea cada vez más fácil aprender música siendo autodidacta, aunque acceder a clases particulares o entrar en alguna escuela puede ayudar a formar cierta disciplina al momento de acercarse al aprendizaje de la música.
Es importante que los músicos, autodidactas o no, generen cierto régimen de constancia que les permita enfrentar la frustración y avanzar con sus ensayos en la maestría de su instrumento.