En «Dear Billy», el destacado episodio de la cuarta temporada de «Stranger Things», Max, interpretada por Sadie Sink; escapa del «Upside Down» al escuchar «Running Up that Hill (A Deal With God)» de Kate Bush. Una canción conmovedora que convierte el clásico pop de la década de 1980 en el sonido de la salvación literal, trabajo musical capaz de trascender e el tiempo y el espacio, un punto culminante para la exitosa serie de Netflix.
Pero, ¿quién es la responsable de que el éxito de Bush reencarnara en el 2022? Nora Felder, la supervisora musical con una larga carrera, y que ha estado con «Stranger Things» desde su primera temporada.
Nora Felder ha obtenido tres nominaciones al Emmy a lo largo de su trayectoria dentro de la música. Y, según Felder, los creadores del programa, Matt y Ross Duffer, no sabían qué canción iban a usar para la icónica escena, por lo que dejaron la idea abierta en el guión para que Felder pudiera hacer algunas excavaciones creativas.
La idea principal para la escena de Max y Vecna es que los recuerdos de la actriz se reflejaran de manera realista, siendo la canción favorita de un adolescente en 1986, pero que también expresara la sensación de aislamiento y depresión de Max después de la muerte violenta de su hermano, Billy.
“La canción realmente necesitaba resonar con la experiencia de Max y amplificar su necesidad de fortaleza y apoyo en ese momento. Cuando aterrizó en “Running Up That Hill”, inmediatamente sentí emoción. Cuanto más marinaba la canción en mi conciencia, me di cuenta de que esto era algo que podía ser especial”.
La mente maestra detrás del OST de «Stranger Things»
La propia Felder ha sido fanática de la canción desde que se lanzó originalmente en el quinto álbum de Bush, «Hounds of Love», considerado por muchos como su obra maestra. “Running Up That Hill” fue un sencillo principal enormemente popular que inspiró versiones y eventualmente se convertiría en la canción más conocida de Kate Bush.
Nora Felder envió la elección de la canción a los Duffer, junto con algunos suplentes, con la esperanza de que eligieran su primera elección. Lo hicieron, lo que llevó a Felder y a su coordinador a concentrarse en obtener la aprobación de la propia Bush y enviar descripciones detalladas de las escenas para explicar cómo se iba a utilizar la canción.
“Realmente quería que entendiera la profundidad creativa de la historia de Max que los Duffer habían imaginado y por qué, en última instancia, esta era la canción perfecta”, contó Felder; para luego Bush aprobar el uso de su canción.
Según comentó Felder, para ella es muy emocionante pensar que la legión de jóvenes fanáticos de la serie podría estar conociendo el trabajo de Bush por primera vez después de ver el episodio; la cual ahora es viral a través de las redes sociales.
«¡Estoy super emocionada!. Siempre sentí que esta canción era tan atemporal. Si se lanzara hoy, no creo que nadie lo cuestione sintiéndose ‘anticuado’ de ninguna manera».