Editorial de Freddy Stock, viernes 07 de noviembre.
La Teletón está en gira… En el Norte Grande se encuentra la caravana de artistas que busca sensibilizar a los chilenos para colaborar en la próxima cruzada televisiva de los días 28 y 29 de este mes. Como es costumbre desde 1978, se pretende dar a conocer una nueva versión de la Teletón chilena que nació como una mezcla de solidaridad y marketing de rostros, empresas y aportes individuales. Una función en el fondo muy noble y con resultados incuestionables. Son 750 los menores con algún grado de discapacidad que se atienden gracias a la Teletón con un 20% de ellos que provienen de países vecinos.
Pero en las formas, la cruzada ha levantado polémicas. El Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas hizo recientemente una revisión de México, como firmante de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. México es uno de los tantos países en América Latina que han replicado el modelo chileno y para la ONU, la Teletón, «promueve estereotipos de las personas con discapacidad como sujetos de caridad» y que le preocupa que «buena parte de los recursos para la rehabilitación de las personas con discapacidad del Estado parte sean objeto de administración en un ente privado».
Las ONU instala el dilema del fin de una cruzada vs. los medios que emplea para llevarla cabo. Una ecuación de difícil definición y que no hemos resuelto o querido, al menos, perfeccionar para seguir adelante…