Radiohead ha protagonizado uno de los grandes regresos de este 2025. La banda salió de gira por primera vez en siete años, y han tenido la respuesta no solo del público, sino también de grandes colegas y contemporáneos. El más reciente, Nick Cave.
El destacado compositor australiano, líder de The Bad Seeds, es un reconocido admirador del grupo de Thom Yorke, los hermanos Greenwood y compañía, y así lo confirmó una vez más, compartiendo su más reciente experiencia viéndolos en vivo.
Cave asistió a uno de los recientes conciertos de la actual gira de los británicos por Europa; más específicamente, a una de las fechas en el O2 de Londres, Inglaterra.
Respondiendo preguntas en su blog The Red Hand Files, el cantante contestó a un fan llamado Jordan que le preguntó si le gustaba ir a conciertos de otros artistas: «Cuando estoy de gira, lo último que quiero es ir a un concierto ajeno. Me siento sobrecargado musical y emocionalmente, y la experiencia en vivo es simplemente demasiado intensa», respondió.
Pese a eso, explicó que afortunadamente ha tenido «un par de meses de descanso de las giras, la vida se ha calmado y, para mi sorpresa, Jordan, he tenido ganas de ir a ver música en vivo». Así, reveló que vio a Radiohead, pero también a otros artistas como Bob Dylan o Cameron Winter.
«En el concierto de Radiohead en el O2, estaba sentado entre veinte mil personas. Curiosamente, era la primera vez que estaba entre el público en un concierto tan multitudinario, y me quedé atónito por la intensidad del amor que se respiraba en la sala: gente bailando, gritando, llorando, abrazándose, agitándose. Me impactó darme cuenta de lo poderosa que es la música en vivo: que un grupo de personas puede unirse y crear un sonido único, y que la gente puede conectar con esa visión distintiva como si fuera su propia experiencia. Podía sentir su cualidad moral: cómo esta fuerza singular tiene la capacidad de reparar el mundo con su bondad», describió.
La importancia de ver en vivo a Radiohead
Eso fue solo el principio para Nick Cave, quien aseguró que ver al grupo no es un simple concierto, sino toda una «experiencia espiritual».
“Participo en diversas actividades espirituales: nado en un lago, voy a la iglesia, camino por la naturaleza, medito, pero ninguna ofrece la oportunidad trascendental de un concierto en vivo. Es una forma de actividad humana que irradia bondad, abriéndose paso entre la multitud y llegando al mundo como una fuerza cósmica y reparadora, mejorando las cosas, manteniendo al diablo a raya. Creo que el público de Radiohead respondió no solo a la música, que era asombrosa, sino también a la valentía de los intérpretes: la valentía de pararse frente a una multitud y ofrecer sus almas. Como todos los presentes, me sentí profundamente conmovido y honrado».
Para concluir, Cave describió a Radiohead como «una banda que se embarca en un acto extraordinario de valentía común, una forma de heroísmo claramente humana: la audacia de plantarse ante el mundo y declarar: ‘Esto es lo que pensamos. Esto es lo que sentimos. Esto es lo que somos‘».
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