Hollywood vive un momento crucial, en medio de todo tipo de movimientos en pos de que Netflix no absorba a Warner Bros. Cuando la transacción parecía darse por hecho, Paramount Skydance ha lanzado una oferta pública de adquisición hostil a los accionistas de WB con la intención de ofrecer un trato mucho más atractivo a los accionistas obviando a la directiva de la compañía.
Y ahora, trsciende que los Ellison están moviendo sus fichas en Washington para ganarse el beneplácito de Donald Trump de cara a esta posible adquisición. Según fuentes cercanas a la Casa Blanca, David Ellison habría prometido cambios drásticos en CNN si Paramount adquiere Warner.
La oferta de Netflix
Durante los últimos meses, Paramount Skydance estuvo intentando comprar Warner Bros. Discovery ofreciendo múltiples ofertas crecientes. El pasado 4 de diciembre, David Ellison, su CEO, lanzó su sexta oferta —la mayor hasta entonces—, de 77.900 millones de dólares. No obstante, las señales de que Warner había a elegido a otro comprador comenzaron a hacerse evidentes cuando David Zaslav, su CEO, dejó de responder a las numerosas llamadas y mensajes de Ellison. El ghosting era un mal augurio en toda regla.
La gran sorpresa se produjo justo un día después, el 5 de diciembre. Ese día, Warner y Netflix anunciaron que se llegó a un acuerdo de compra de 72.000 millones de dólares. En este momento, Paramount entró en DEFCON 1, y el clan de los Ellison movilizó sus recursos. Larry Ellison, fundador de Oracle, aliado de Trump y padre de David Ellison, llamó al presidente de los EE.UU. para advertirle de que el pacto con Netflix sería “muy perjudicial” para la competencia.
El contraataque de Paramount
Por otro lado, David Ellison viajó a Washington para ganarse el favor del presidente Trump, prometiendo cambios drásticos en la cadena de noticias CNN si Paramount adquiere Warner, tal y como revela el Wall Street Journal. Se trata de una oferta implícita de reorientación editorial en CNN que tiene como objetivo ganarse el apoyo de Trump en el proceso regulatorio. Este gesto podría resultar especialmente atractivo para el POTUS, dado su enfrentamiento prolongado con CNN y su interés declarado en ver cambios en la cadena, a la que ha acusado durante años de actuar de manera sesgada en su contra.
Tras esto, Paramount rompió el protocolo el 8 de diciembre, lanzando una OPA hostil directamente a los accionistas de Warner Bros. La oferta, valorada en 108.400 millones de dólares, sería demasiado atractiva para ser ignorada, ya que ofrecen 18.000 millones más en efectivo a los accionistas que lo ofertado por Netflix, además de ser más viable a nivel regulatorio. La operación está respaldada a nivel financiero por tres fondos soberanos de Oriente Medio, así como por Jared Kushner, yerno de Trump.
La posición de Donald Trump por la adquisición de Warner Bros.
Donald Trump no se decanta en público ni por Netflix ni por Paramount. “Ninguno de ellos es particularmente amigo mío”, declaró el pasado fin de semana. En su lugar, todo apunta a que quiere que Paramount y Netflix compitan por su aprobación, con la amenaza implícita de que quien no se haya ganado su beneplácito previamente, sufrirá considerables trabas por parte de la administración y entidades como la Comisión Federal de Comercio (FTC).
Aunque el presidente solicitó que lo mantengan informado de cualquier posible investigación antimonopolio por el acuerdo de Netflix, la realidad es que Warner y Zaslav siempre apostaron por la plataforma de streaming de Ted Sarandos. Según Allen & Co., asesores de Warner, “cash is king”: el conglomerado buscaba rapidez en la operación y liquidez total para salir de su atolladero financiero mediante la venta, y Netflix ofrecía todo esto. Por lo pronto, habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos tras la contraoferta de Paramount.
Lo que está en juego en Hollywood es legado. Warner Bros. es considerada una de las joyas históricas de la industria. Se trata de un estudio centenario cuyo catálogo abarca desde clásicos como «Casablanca» hasta éxitos modernos como «The Sopranos» o «Game of Thrones». Por esto, controlar Warner implica, a todos los efectos, redefinir el panorama del entretenimiento a nivel global, consigna As.com.
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