En una entrevista exclusiva con AS Chile, el panelista de Futuro Fútbol Club, Dante Poli se refirió a su carrera en el fútbol y su paso por el Manchester United.
El mundialista sub 17 en Japón 1993 partió a Inglaterra para tener una prueba en el conjunto que entrenaba Sir Alex Ferguson. Si bien regresó a Chile, pudo jugar dos partidos y exprimir una experiencia única en los ‘Diablos Rojos’. Por esa experiencia, relató una graciosa anécdota de sus tiempos en el equipo inglés.
¿Tiene alguna historia de su etapa en Manchester United que hasta el día de hoy no se sepa?
«Las más cómicas o tragicómicas ya se saben, pero siempre he dicho que lo que más me sorprendió fue la manera de dirigir por parte de Alex Ferguson en esa época, que no lo dimensioné. Él no estaba en la práctica todos los días, las observaba de arriba y aparecía puntualmente para dar ciertas instrucciones. Era una forma de dirigir y conducir. No existían tampoco las concentraciones antes de los partidos, había una autorresponsabilidad que es muy natural de allá y que en Sudamérica es mucho más lejana. Haber vivido ese mundo nos lleva a repensar muchas cosas que me sirvieron más para la vida o posterior al fútbol».
Dicen que la noche de Manchester es especial. ¿La vivió?
«No la viví tanto, mucho menos de lo que me hubiera gustado (ríe). De hecho, hay una anécdota de los chicos de esa época que eran de mi edad como Nicky Butt, (Paul) Scholes y otros».
¿Qué pasó?
«Me dijeron: ‘Mira, tu anda a cualquier lado y di que eres nuevo jugador del Manchester United y las puertas se te van a abrir de par en par’. Eso le pasa a los jugadores de fútbol en cualquier entorno cercano. Lamentablemente, no le pude sacar ese jugo que me hubiese encantado en algún momento. Me gusta divertirme, salir de vez en cuando y estar con los amigos, ese es un momento de felicidad».
¿Y usó esa táctica?
«¿Allá en Manchester o en cualquier lado?».
En Manchester o en cualquier otro lado…
«Tengo un amigo, que no voy a dar el nombre, pero es muy conocido, que le decía al de la puerta de la entrada de un VIP con las manos en gesto de rezo, ‘te lo juro que soy futbolista, por favor déjame entrar’. No lo logró, pero uno buscaba esa herramienta cuando había cierta desesperación. Reconozco que más de alguna vez lo debo haber hecho (sonríe)» reveló Dante Poli.
