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Nuevo álbum y puesta en escena: Johannes Eckerström explica la estrategia de Avatar para 2025

Johannes Eckerström, defendió que los fans mantienen viva la escena del metal, mientras la banda prepara un nuevo álbum 2025.

Johannes Eckerström
Getty Images

Cuando habla Johannes Eckerström, no es sólo la voz de una banda de metal. Es la voz de un movimiento que se resiste a desaparecer. En una reciente entrevista con Rock FM, Eckerström rechazó la narrativa de un metal en retroceso y puso el foco en lo que mantiene viva la escena: la comunidad. “No importa cuánto o poco espacio nos den los medios masivos, son los fans los que sostienen esto”, afirmó con la mezcla de solemnidad y mordacidad que lo caracteriza.

Esa confianza en la base fanática tiene consecuencias prácticas. Avatar no se conforma con giras mecánicas: su puesta en escena, la iconografía del “circus” que Eckerström ha ido puliendo y su relación cercana con directores visuales, funcionan como un imán que transforma conciertos en experiencias únicas. Esa teatralidad, más allá de la máscara, es una estrategia deliberada. Crear algo que no se replica fácilmente en playlists o algoritmos.

Johannes Eckerström: la banda muestra músculo creativo:

Según declaraciones recientes, Avatar tendría un nuevo álbum previsto para finales de 2025. Dato que recalca que la agrupación no sólo apuesta por el show, sino por material propio que sostenga ese relato escénico. Ese anuncio posiciona a la banda en un lugar clave dentro de la escena contemporánea. Equilibrio entre producto artístico (disco), espectáculo en vivo y fidelización de comunidad.

Festivales, clubes y foros especializa­dos siguen registrando actividad y buenas entradas, y las giras internacionales siguen siendo la principal fuente de ingresos y visibilidad para las bandas. La postura de Eckerström no suena a negación romántica. Es diagnóstico y plan al mismo tiempo, según consignó Blabbermouth.

El caso Avatar como caja de resonancia:

Una banda que combina teatralidad, un frontman con carisma y discurso definido, y agenda discográfica, demuestra que el metal no es un género en “declive”, sino un ecosistema que muta y se fortalece en sus propios términos. Y en el centro de esa mutación están siempre las audiencias. Las que mantienen una escena viva, estación tras estación.


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