Tras los polémicos comentarios de Néstor Grindetti sobre la suspensión del partido de vuelta frente a U. de Chile por los octavos de final de la Copa Sudamericana, Independiente se pronunció a través de un comunicado.
“Independiente condena enérgicamente los gravísimos hechos de violencia ocurridos anoche en el Estadio Libertadores de América que obligaron a la cancelación del encuentro entre nuestra Institución y la Universidad de Chile por parte de Conmebol”, partieron diciendo.
Desde el club prometieron trabajar incansablemente “para que cada responsable individual sea identificado y sancionado. Solicitando la aplicación del derecho de admisión a los delincuentes disfrazados de hinchas que respondieron con violencia las agresiones de la parcialidad visitante”.
Por otra parte, mencionaron que «de acuerdo con las imágenes difundidas, reportes oficiales y partes policiales, los incidentes se iniciaron en el sector visitante desde la previa del partido». Hasta acusaron a la hinchada azul de «atacar e inactivar el sistema cerrado de cámaras de seguridad».
Independiente se pronuncia ante el conflicto en Avellaneda
Cumpliendo lo adelantado por el presidente del club tras el escándalo, Independiente elevará un reclamo para que se le otorgue el triunfo por secretaría en la revancha suspendida frente a U. de Chile. “El presidente y el secretario general del club se encuentran camino a Paraguay para trabajar en representación de Independiente ante Conmebol y terminar de resolver las implicancias a nivel deportivo».
Lo que se sabe sobre el inicio de los hechos
En los minutos finales del primer tiempo del partido entre Independiente y la U. de Chile (Copa Sudamericana). Hinchas de la U, desde la tribuna visitante alta, arrojaron desde palos y piedras hasta asientos y una bomba de estruendo hacia los simpatizantes locales. A los 48 minutos, después de un inicio demorado del segundo tiempo, el árbitro suspendió el encuentro de manera definitiva.
Los jugadores retornaron a vestuarios con la ilusión de retomar el partido en apenas 20 minutos, pero nunca se reanudó. En medio del desconcierto, algunos hinchas de Independiente invadieron el césped, mientras que los más radicales de la U irrumpieron en la tribuna local. Desatando un enfrentamiento brutal y una batalla campal en Avellaneda.
En medio del infierno en Avellaneda, hinchas armaron una cacería brutal contra los visitantes. Golpearon con barras, empujaron a un hombre desde la grada y dejaron a otro inconsciente tras un impacto en la cabeza. Las escenas muestran cuerpos ensangrentados abandonados en las butacas, testigos mudos de una violencia espantosa.
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