Un 25 de agosto de 1997, Radiohead lanzó uno de los sencillos más emblemáticos de su carrera: «Karma Police».
Integrado en el histórico álbum OK Computer, la canción se convirtió rápidamente en un himno de la década de los noventa y en un punto de quiebre dentro del imaginario sonoro de la banda de Oxford.
Un himno nacido de la experimentación
Su llegada no fue casual, sino parte de un proceso creativo que estaba llevando a Radiohead hacia un terreno más experimental. Alejándose por completo de la escena que aún dominaba inglaterra, para sumergirse en paisajes más oscuros y existenciales
Lo curioso es que «Karma Police» ya había tenido un debut antes de su lanzamiento oficial. En 1996, durante una gira junto a Alanis Morissette, la banda se atrevió a mostrar el tema en vivo, cautivando a quienes fueron testigos de esa primera versión. Aquella gira, que funcionó como un laboratorio para probar material de OK Computer, fue clave para pulir canciones que hoy se consideran clásicos.
La inspiración detrás de «Karma Police» conecta con el propio humor ácido y crítico de Thom Yorke. El título hace referencia a una especie de «justicia universal» que castiga a quienes abusan de los demás, y la letra mezcla sarcasmo, cinismo y una atmósfera inquietante que refleja tanto la desilusión política como las tensiones personales de la época. Musicalmente, la canción combina un piano hipnótico con guitarras que estallan en un crescendo catártico. Marcando un contraste entre fragilidad y fuerza que se transformó en sello de Radiohead.
Un éxito absoluto
En su momento, la recepción fue inmediata: el sencillo alcanzó el número 8 en el Reino Unido y se instaló como una de las canciones más reconocidas del grupo. Su videoclip, cargado de simbolismo, reforzó la sensación de misterio y angustia que envolvía a la pieza. Con el paso del tiempo, «Karma Police» ha mantenido intacta su relevancia. Siendo interpretada en prácticamente todas las giras de la banda y convertida en uno de esos temas que condensan la esencia de Radiohead.
Hoy, a más de dos décadas de su estreno, «Karma Police» sigue siendo más que un sencillo. Es un manifiesto artístico sobre la alienación y la búsqueda de sentido en un mundo caótico. Una obra que, como gran parte de OK Computer, aún dialoga con las ansiedades del presente y que reafirma a Radiohead como una de las bandas más visionarias de su generación.
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