ENTREVISTAS

«Generalmente los hombres de 40 empiezan a hacer agua. Se espera que a esa edad uno sea un hombre realizado»

El psicólogo Sebastián Rodríguez habló sobre la crisis de los 40 y como "los hombres no suelen hablar de temas que los acomplejen”

Sebastian Rodriguez Pqn Web
Radio Futuro

Un nuevo programa de Palabra Que es Noticia, Andrea Moletto conversó con Sebastián Rodríguez, psicólogo, coach y columnista de La Tercera, sobre la crisis de los 40 y cómo afecta a los hombres.

Una crisis común pero silenciada

Rodríguez plantea que: “Las crisis masculinas son algo de lo que se habla cada vez más, pero sigue siendo algo de lo que se habla poco y son temas realmente importantes, temas de salud, vida, trabajo. Hay muchos cambios entre los 40 y los 50, porque hay muchos hombres que tienen hijos chicos o adolescentes y papás mayores, entonces tienen que atender a estos, sostener un matrimonio donde la señora puede tener los mismos problemas por su lado y temas laborales”.

“Es una edad de mucha responsabilidad y ahí hay distintos tipos de reacciones frente a tanta responsabilidad”, agregó.

Los dolores que aparecen

Sobre los dolores más típicos en este proceso, Rodríguez menciona: “Uno de los más típicos es la disyuntiva, el tener que trabajar para mantener a sus familias y ver a sus hijos, por lo que tienen que hacer un balance y de repente no les da, o les pasa lo mismo a nivel matrimonial, porque los dos trabajan y tienen mucha responsabilidad, entonces son dolores que como van a sesiones de coaching hablan de pega y de repente cambian el tema por algo que les acompleja y dicen “nunca había hablado de esto”.

Asimismo, añadió: “Los hombres no solemos hablar de temas que nos acomplejan y les hacemos el quite”.

La crisis de los 40

El psicólogo distingue esta etapa de la crisis que suelen vivir los hombres a los 30: “La crisis clásica del hombre de los 30 es por intimidad, de la capacidad de establecer una relación de pareja o con el trabajo, en cambio la de los 40 es la crisis de la generatividad, de generar cosas, entonces cuando los hombres se sienten estancados en esto, ya sea que no han ascendido en el trabajo, no pudieron tener hijos o no tuvieron la familia que querían y perdieron lo que habían soñado. Todo eso se ve interrumpido y generalmente los hombres de 40 empiezan a hacer agua, porque lo que se espera o lo que uno soñó es que a esa edad uno sea un hombre realizado”.

También, Rodríguez advierte que los hombres han cambiado mucho en este último tiempo: “Tengo clientes que tienen roles super maternales y están muy involucrados con los hijos, mientras que hay otros que están muy enfocados en ellos mismos y esta es una crisis que cuando uno la mira desde fuera puede ser muy egoísta cuando buscan este tercer espacio donde “yo soy yo”, en relación a otras personas que tienen más o menos intereses parecidos”.

El valor de hablar de esto

Asegura que muchas veces son las parejas quienes motivan a los hombres a buscar ayuda: “Muchas veces las señoras son las que han mandado a mis clientes y en general el coach funciona bastante bien, porque es menos amenazante que ir al psicólogo, y es bastante grato poder habla de esto para ellos, porque en el coach, no hay una amenaza ni consecuencia en lo que digo, yo los escucho como si escuchara cualquier tema”.

“A los 40 el camino no es tan cuesta arriba, pero empiezan todas las dudas porque uno ya tiene más o menos nociones de a donde llegó, entonces además de esta crisis laboral, está la familiar, donde los hijos ya están más grandes y te cuestionan. Empieza a ser amargo por ahí a ratos. Es una edad menos moralista a diferencia de los 30”, señaló Rodríguez.

Concluye que es fundamental hablar de esto: “Se parte conversando, tomándolo como un proceso donde uno va conversando y cuestionando peor con tranquilidad, cuando uno va seriamente a un proceso de coaching o terapia uno tiene la oportunidad de reflexionar las cosas por mucho tiempo. Pasan tantas cosas a los 40 que si uno no para un poco la máquina y se para a pensar uno sigue varios pilotos automáticos. Es super positivo invertir plata en conversar”.


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