Un registro audiovisual revelado por ADN dejó al descubierto una situación que vuelve a poner en el foco al arbitraje nacional, a la Universidad Católica y a Deportes Limache.
En el video se observa al equipo arbitral encabezado por Rodrigo Carvajal y José Cabero recibiendo un par de camisetas de Universidad Católica, tras la victoria cruzada por 2-1 ante Deportes Limache, el pasado 19 de abril en el Estadio Sausalito.
El partido no estuvo exento de polémica. Limache cuestionó duramente dos cobros penales a favor de la UC, lo que agudizó las sospechas al conocerse estas imágenes.
En ellas, se logra apreciar como una persona con vestimenta oficial del club cruzado entrega unas camisetas en la puerta del camarín arbitral. Sin embargo, minutos después, los mismos árbitros las devolvieron al vestuario local, asumiendo el error y descomprimiendo la situación.
Los dichos de César Villegas, presidente de Deportes Limache
El video tomó fuerza luego de que César Villegas, presidente del club de Limache, asegurara en ADN que, un funcionario del club presenció la entrega.
“Después del partido con Católica, uno de mis funcionarios vio que entraron al camarín de los árbitros y les regalaron un par de camisetas. Y me consta. Me lo dijo una persona que trabaja conmigo”.
¿Qué opinan desde el arbitraje?
Aunque la práctica de intercambio de camisetas entre jugadores y árbitros es común en el fútbol profesional, esta vez no pasó desapercibida. Un ex árbitro, que prefirió mantener el anonimato, explicó que “es un código entre jugadores y árbitros de mayor trayectoria”, y que incluso se realiza en torneos internacionales.
Sin embargo, también fue enfático: “Cuando un partido termina tenso, con altos cuestionamientos al desempeño de los colegas (…) lo sensato es no pedir ni recibir camisetas. Hay que fuardar las formas porque, ademas, expones demasiado al equipo que supuestamente se vio beneficiado”.
Desde la vereda de la organización, un ex colaborador de partidos Conmebol agregó: “Los árbitros chilenos tienen fama de pedir camisetas y otros recuerdos. Puede que sea legítimo, pero hoy, en tiempos de redes sociales, donde cualquier gesto puede levantar sospechas, lo más sano es evitarlo”.