El resultado de Incubus en Chile todos lo sabemos. Abrieron la cuarta jornada del Festival de Viña del Mar y el público les entregó dos Gaviotas. Tres shows completamente vendidos en Movistar Arena, casi un mes y fracción después de lo realizado en la Ciudad Jardín y el público local los sigue venerando. ¿Cuál es la fórmula de los californianos para tanto éxito por estas latitudes?
23 millones de álbumes en su registro muestran de manera simple la entrada de sus sonidos al pópulo. Los que teníamos consciencia musical en el lejano 2001 cuando salió «Morning View» (cuarto disco de la banda y regrabado el 2023) fue un fenómeno en radios, programas de televisión musicales y los incipientes programas de descargas de mp3.
Un mundo en ciernes con el nuevo milenio ocurriendo y el nu-metal sumado con el rock alternativo liderando los ránkings de todo tipo. Pasó el tiempo. Incubus tomó su exitoso disco, realizó una gira en el 2025 e incluso lo regrabó.
Incubus en Chile 2025: El primer show en Movistar Arena
De la mano de el vocalista Brandon Boyd de 49 años. Mike Einziger en la guitarra, piano, y tercera voz, José Pasillas en la batería, Chris Kilmore en el órgano, teclado, tornamesa y la renovación de Nicole Row en el bajo y la segunda voz componen una simbiosis que se conjuga perfecto en el vivo y logra juntar piezas para satisfacer masas.
Esto ocurrió en el primero de sus tres shows en Chile. Un Movistar Arena repleto y el inicio con «Nice To Know You» entrega la primera inyección de lo que vendría en la hora y cuarenta minutos de shows.
La reproducción del álbum del que entrega nombre la gira mantuvo a los asistentes expectantes, fervientes y nostálgicos de lo que ocurría en el escenario. «Wish You Were Here», «Warning», «Pardon Me». «Drive» e incluso covers de Phil Collins y Rihanna entregaban frescor a un conjunto que con el color idéntico de voz al Brandon Boyd que conocemos, un DJ que entrega pasadas distintas a un rock cadencioso, el funk y las armonías de Nicole Row, los riffs lisérgicos y rabiosos de Einziger y los múltiples hits de Incubus apelan a un público que recordó aquel lejano 2001 y de una banda que día a día y en cada show en vivo, entrega la fórmula de permanecer en el tiempo y no morir en el intento.