Sharon Osbourne, esposa y mánager de Ozzy Osbourne, habló sobre la tensa relación entre el vocalista y sus compañeros de Black Sabbath. Según ella, los demás integrantes del grupo sentían resentimiento hacia su esposo por la notoriedad que tenía dentro de la banda.
Sharon afirmó que los músicos siempre tuvieron una actitud de recelo hacia Ozzy. “Siempre se trataba de Ozzy esto, aquello y lo otro, Ozzy esto…”, recordó.
También sugirió que Tony Iommi intentó reducir la presencia de su marido en escena. “Tony lo hizo mover a un costado para que Tony pudiera estar en el medio”, aseguró.
Adicciones y problemas internos
Según Ultimate Guitar, la banda atravesó años turbulentos marcados por excesos y tensiones personales. Sharon reconoció que Ozzy tenía serios problemas con el alcohol y las drogas, lo que lo hacía más vulnerable en comparación con sus compañeros. “Creo que, en resumidas cuentas, todos sabemos que Ozzy nunca fue un buen bebedor. Siempre era el primero en caer al suelo. Quiero decir, el peor bebedor del mundo y el peor consumidor de drogas”.
Sharon Osbourne y Ozzy Osbourne
Aunque los demás miembros también tenían problemas con las adicciones, según Sharon, lograban ocultarlo mejor. “Los demás podían mantener cierta apariencia de ‘Estamos bien’, pero Ozzy siempre estaba en el suelo”.
Un talento cuestionado
Además de las disputas internas, la mánager aseguró que la banda no valoraba lo suficiente a Ozzy por el simple hecho de no tocar un instrumento. “Y honestamente creo que, como Ozzy no tocaba ningún instrumento, su valor a los ojos de ellos era [pequeño]. ‘Sólo cantas. Todo lo que haces es cantar’”.
Según Sharon, este menosprecio se combinaba con la envidia. “Pensaron: ‘No haces nada. Estás borracho todo el tiempo. ¿Por qué obtienes toda esta notoriedad?’ Y creo que eso tuvo mucho que ver con eso. Eran niños”.
A pesar de estas dificultades, Ozzy logró construir una exitosa carrera en solitario, convirtiéndose en una de las figuras más icónicas del heavy metal.