Brian Johnson recordó lo difícil que fue su llegada a AC/DC. Tras la muerte de Bon Scott, asumió el desafío de convertirse en el nuevo vocalista.
Según Rock FM, el primer reto fue grabar Back in Black, un álbum que marcaría la historia del rock. En una entrevista, Johnson contó cómo fue el proceso. “Malcolm y Angus Young vinieron y me dijeron: ‘Oye, por cierto, ¿puedes escribir letras?’. Y yo dije: ‘Bueno, lo intentaré’”.
Brian Johnson
La banda le dio un título: You Shook Me All Night Long. “Me dieron el título y dije: ‘Joder, es muy largo’”, recordó. En solo 20 minutos, escribió la letra y al día siguiente la grabó.
Durante la producción, el productor Mutt Lange lo desafió a ir más allá. “Fue fascinante, porque nunca supe que podía sostener notas así”, confesó. “Fue como liberarme de una camisa de fuerza”.
Lange le pidió que cantara más alto. “Te he oído hacerlo”, le insistió. Johnson aceptó el reto. “En cuanto descubrí que podía hacerlo, dije: ‘¡Vaya! Esto es increíble”, recordó.
Un golpe inesperado
Cuando el disco salió, Johnson tuvo un duro golpe. Quiso escucharlo con un amigo, el guitarrista de su banda anterior, Geordie. “Pusimos Hells Bells y a los pocos compases, me dijo: ‘No, eso no va a funcionar. Vamos, tomemos una pinta’”.
La reacción lo devastó. “Me dijo: ‘Estás cantando demasiado alto. Ese no eres tú’”, recordó. “Se me rompió el corazón. Me dije: ‘Oh, Jesús’”.
El éxito que no imaginaba
Johnson salió a ahogar sus penas, convencido de que había fallado. Sin embargo, el tiempo demostraría lo contrario. Back in Black se convirtió en el álbum más vendido de AC/DC y uno de los más exitosos del rock.
Décadas después, aún le sorprende su impacto. “Todavía no me cabe en la cabeza que hayan pasado 40 años desde que lo hicimos”, afirmó. “Y todavía podemos cantar [esas canciones] en el escenario. Eso es lo maravilloso”.