En Palabra Que es Noticia, Andrea Moletto conversó con Cristian Sanhueza, uno de los abogados representantes de la causa en la que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (DIH) condenó al Estado de Chile por las malas condiciones de detención de adolescentes en el Servicio Nacional de Menores (Sename) y la muerte de 10 de ellos en un incendio en el año 2007.
Este fallo histórico incluye una multa de 647 millones de dólares y condena las violaciones de derechos humanos sufridas por 271 menores en el Sename. La Corte también destacó las falencias del sistema penal juvenil en Chile. Señaló la falta de protocolos adecuados para garantizar la seguridad y el bienestar de los internos. Este fallo marca un hito en la lucha por justicia para los menores afectados por el sistema.
La tragedia de Puerto Montt
En 2007, un incendio en el centro de detención del Sename en Puerto Montt conmocionó a Chile. Sanhueza explica que el incidente comenzó como una protesta por las malas condiciones de los jóvenes internos.
“A las 23:00 hrs les cortaron la luz, lo que usualmente marca el inicio de la hora de dormir. Sin embargo, estaban en plena protesta, y se esperaba que las autoridades actuaran para reducir el conflicto y asegurar la seguridad. Sin embargo, esto no ocurrió”, señaló.
El fuego se originó por la quema de colchones y el uso de balones de gas inflamables. “El incendio no fue sofocado a tiempo por bomberos, y no abrieron las puertas”, añadió. Como resultado, 10 jóvenes murieron, muchos debido a la demora en el rescate.
“El Sename, Gendarmería y los bomberos reaccionaron tarde”, explicó Sanhueza. La Corte Interamericana de Derechos Humanos halló que las instituciones involucradas actuaron con total negligencia. Reconoció que las muertes fueron consecuencia directa de las deficientes condiciones de detención y la falta de protocolos de seguridad. “La falta de acción esa noche generó consecuencias fatales”, concluyó el abogado.
Un sistema que no garantizaba los derechos de los menores
La sentencia del DIH no solo abordó el caso de las muertes en el incendio de Puerto Montt, sino que también amplió su alcance al analizar las condiciones generales de los centros de reclusión juvenil del Sename en 2007.
Según Sanhueza, gracias a este caso “lo primero que se acredita es que había una sobrepoblación. Además, no había segregación, es decir, segregar a personas que ya estuviesen cumpliendo una pena de aquellos que estaban siendo procesados. Asimismo, tampoco había segregación respecto a la edad”.
A esto se suman “las condiciones de habitabilidad, es decir, problemas de higiene, malos baños, agua helada. Y por último, cuestiones que tienen que ver con ausencia de programas de educación”, agregó.
La Corte destacó la vulneración de derechos fundamentales, como el derecho a la vida digna, la educación y la salud. Estos son aspectos esenciales para el bienestar de los menores.
Por su parte, Sanhueza señaló que la sentencia subraya el grave incumplimiento de las obligaciones del Estado chileno. Este incumplimiento afecta los derechos de los niños, niñas y adolescentes bajo su custodia.
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