Kerry King no tiene intención de escribir una autobiografía. En una entrevista con Sara Parker de la estación de radio WMMR de Filadelfia, el guitarrista de Slayer dejó clara su postura.
«No lo creo. Y sé que la gente va a venir a llamar a mi puerta porque he sido la voz de mi banda [en solitario] y la voz de Slayer durante la mayor parte de los últimos 20, 30 años», explicó.
Según Blabbermouth, King cree que, al ser siempre directo en entrevistas, no hay mucho más que contar en un libro. «A medida que avanzaba, más entrevistas comenzaron a llegarme. Y no me ando con rodeos: digo las cosas como son en las entrevistas, la radio, las revistas, lo que sea. Así que, aparte de la suciedad real, no hay nada sobre lo que escribir».
No traicionaría a su banda
El guitarrista fue enfático en que nunca revelaría información comprometedora sobre sus excompañeros. «Nunca voy a echar a mi banda por la borda», afirmó.
En 2010, ya había expresado su desinterés por este tipo de libros al hablar sobre la autobiografía de Dave Mustaine. «No necesito escuchar qué clase de tonterías hay en ese libro. Dave tiene una perspectiva muy sesgada», dijo en ese momento.
Un libro sobre Slayer tampoco le interesa
King tampoco ha considerado escribir un libro sobre Slayer. «He olvidado más historias de las que puedo recordar, estoy seguro… Entre los cuatro, podríamos reconstruir las cosas, pero no tenemos las sobredosis de drogas ni los terapeutas y todo eso», comentó.
Para él, las memorias de algunas bandas suelen centrarse en los excesos y el drama. Sin embargo, no cree que Slayer tenga ese tipo de historia que llame la atención.
Su presente en solitario
King sigue enfocado en su carrera solista. En 2024, lanzó From Hell I Rise, su primer disco fuera de Slayer. El álbum fue bien recibido, aunque él mismo reconoció que las comparaciones con su antigua banda eran inevitables.
«Habrá gente que se quejará, ‘¿Por qué suena como Slayer?’ y ‘¿Por qué no suena más como Slayer?’ Eso es simplemente lo que hace la gente», comentó.
Su banda ha estado de gira por Europa y Estados Unidos, consolidando su identidad tras la disolución de Slayer.
