ENTREVISTAS

Luis Gnecco y el Gobierno del Presidente Boric: «Una decepción. Creo que le ha costado mucho aterrizar»

Conversamos en #FuturoPSP junto al actor, Luis Gnecco, para conversar sobre el regreso del histórico programa “El Desjueves”.

Luis Gnecco
Radio Futuro
  • Por Equipo Futuro.cl
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Conversamos en Palabras Sacan Palabras junto al actor, Luis Gnecco, para conversar sobre el regreso del histórico programa de comedia televisivo de los ‘90 “El Desjueves” en formato podcast.

¿Por qué a ustedes se les ocurrió estos tres señores a esta altura, con respeto, con amor.

«Con mucho amor y mucho respeto. Estamos en muy buena forma».

No, ustedes están regio.

«Fuera de broma, sabes por qué, te voy a contar el cuento rápido» señaló Luis Gnecco.

No tienes que contar rápido. Lo único que me tienes que contar el cuento verdadero.

«No, si no el cuento verdadero y rápido. Pero las mujeres siempre tienen miedo que les cuenten el cuento. ¿No?».

Esta alturas, no. Cuéntame un cuento. A ver que yo me crea. Eso sería fantástico.

«Me invitó Jorge Zabaleta, que supongo debe ser dueño de alguna de estas radios. Nos invitó a su programa de la parrilla. No sé cómo se llama. El de la parrilla. Socios de la parrilla, podría ser los guatones de la parrilla. Ya lo pasamos súper bien. Y de repente estábamos los tres Cristian, Roberto y yo. Nos veíamos esporádicamente, sabíamos de cada uno esporádicamente estábamos ahí en el programa, conversando como que medio que nos tomamos el programa, comenzamos a conversar, y la verdad que honestamente cachamos que no estábamos nosotros haciendo el programa obviamente, digamos, para eso».

Pero para eso los invitaron.

«Invitado».

Y les pagaron para que hicieran el programa, porque no fueron gratis.

«Pagaron bastante bien, fíjate».

Aquí no pagamos, por eso viniste tú nomás

«Sí, porque pensé que pagaban. Pasó el programa y dijimos, pero viste como enganchamos, como conversamos. Yo pensé que estábamos en el geriátrico. En el hogar de Cristo. No sé, con la sonda en alguna parte. No estamos aquí vivito y coleando. Y honestamente, ya comenzamos a reunirnos, a perfilar esto. Y de repente yo dije tenemos que movernos con una productora porque solos podemos estar conversando acá en el Tavelli el año entero como los viejos de mierda que somos. Pero efectivamente, así más o menos ibamos para eso, como reunión de viejos los días jueves. Entonces dije ya, hagamos de esto un programa. Se lo propuse a mi amigo Pablo Brunetti, actor argentino que tiene una una productora que se llama Sur Audiovisual. El productor dijo bueno, pero este es un programa que fue la raja, hagámoslo YouTube, canal de YouTube y estamos ahí de a poquito. Esto de verdad estamos como tanteando. Mañana lo hacemos de nuevo a las 22:00 de la noche, a la hora habitual estamos todos los días jueves siempre hasta que nos dé el cuero, hasta que hasta que nos vayamos al hogar de Cristo».

En la Fundación Las Rosas sería. Pero espérate porque ustedes están los tres. Yo pensé que esto lo estaban haciendo ustedes solos, no sabía que había una productora detrás, porque igual es bien modesto, no era el Desjueves, hay que decirlo, había un cuerpo baile

«Agarrábamos el poto a las señoritas que bailaban. Una cosa muy impropia que hoy en día no se puede».

Imposible. Eso ya es abuso. Pero además, yo te quiero decir que están ustedes tres sentados y como uno entiende que pasa de un lugar a otro, porque uno de repente uno ve tres fachos, eso ve uno, pero después uno ve tres comunistas

«Yo pensé que solo se quedaban con la imagen de fachos».

¿Van cambiando o no?. Ahora es bien difícil detectarlo porque estamos iguales. Es como circo pobre o se cambian de ropa. Están criticando el programa, que esto es un circo pobre. Nada que ver. No, lo que pasa es que estamos empezando. Tienes toda la razón. Y nosotros no hemos planteado esto.

Llevar el vestuario de la casa.

Menos es más Less is beautiful y todas esas cosas. Small is beautiful. Honestamente no sabíamos. Dijimos ¿Qué hacemos? ¿Cómo lo hacemos? Nadie tiene una productora. Y además, imagínate estos dos señores que efectivamente están más cerca de la Fundación de las Rosas que yo.

Luis Gnecco: Pero ustedes hablan de la experiencia de la parrilla.

«Nos reímos honestamente, eso nos unió, porque hoy en día la cosa está un poco seria, está un poco adusta, media latera, incluso, para ser honesto. Entonces dijimos, nosotros todavía comenzamos justamente a hacer bromas con esto, que la que la Fundación La Rosas que, en qué estas, yo estoy haciendo unos monólogos en la parrillada Don Chito, allá en el paradero no sé cuánto de la Gran Avenida. Y tu que haces? Cuando yo estoy manejando el Uber porque después me cancelaron. Ya y tu? yo hago clases ya, entonces juntémonos y veamos si enganchamos ya, perfecto, insisto y nos juntamos los días jueves unos viejitos a tomar café y ya demos paso más y el paso posterior fue ¿Quién conoce a la productora? Yo, si yo estoy trabajando, yo estoy activo, ya tengo 25 años menos que ustedes».

Ellos querían seguir ahí yendo al café.

«No. Nos estábamos planteando cómo hacerlo. Productora, cámara, que hoy en día con el celular graba».

Yo puedo decir que es verdad que el vestuario todavía no está tan listo. Pero el mono, voy a decirlo en términos televisivos. La imagen es buena. Y lo que sí es que me llama la atención lo que tú estás diciendo, que tiene un humor que es bastante ácido.

Porque el humor tiene que ser ácido encuentro yo. Es un salto al vacío porque hoy en día el humor no es ácido. El otro día yo estaba con mi hijo, me presentó su polola. ¿Entonces le dije qué opinas tú de mí? No, que hablas como funado, porque hablas del guatón culiao, el chino de mierda. Pero yo hablo así. Perdóname, estoy en mi casa y hablo así. Entonces hoy en día tú no puedes decir guatón de mierda. Yo estoy en contra de los no se puede. Yo encuentro que uno puede hacer todo. Cuáles son los límites. Y de verdad es una pregunta que yo no la tengo clara y tampoco nadie la tiene clara.

¿Cuáles son los tus límites?

«Ninguno. De verdad, creo que ninguno. Y hay un riesgo».

Yo sí creo que hay algunos. He definido que la proximidad puede ser un límite.

«Proximidad por ejemplo, agarrarle el poto a la bailarina. Estoy bromeando por supuesto, porque jamás haría eso».

Yo creo que en principio no hay ningún límite, pero creo que uno se puede dar algunos.

Sería inocente decir que no hay límites, porque los límites existen.

En principio no existen, no hay unos que son claros, pero creo que uno se da algunos. La proximidad de la actualidad del hecho.

«Tú te ríes sobre eso. Igual te arriesgas. Estoy de acuerdo. Porque esa proximidad puede herir sensibilidades» dijo Luis Gnecco.

Hay algunos que se autoimponen ciertos límites también por razones. Por ejemplo, en el caso de el The Clinic podría haberse puesto en el tema de la violación de derechos humanos y poner un límite ahí en que tú no te vas a reír de eso en una portada, por ejemplo.

«Mira, yo protagonicé una serie años atrás que se llamaba la Office. La Office era sobre un jefe imbécil que por sus desmadradas se mete en problemas. Esa serie ha sido, digamos, ha ido al límite en todas partes del mundo. Ya, y en Chile no le fue bien, un éxito en YouTube, como escondida. En el mainstream , como que aparentemente un auspiciador tiene que publicitar eso, va a decir que no, porque nadie quemar, pero te aseguro ese mismo auspiciador la escondido en YouTube. Bueno, yo tengo una teoría sobre eso, que estaba de director de programación en esa época se sentía identificado con el personaje, entonces por eso no la ponía. Con esto, él que estaba criogenizado, se despertó, acaba de despertar».

El señor Vidal, no quiero hablar de él ni nada, no tengo nada contra él. El punto es el siguiente este, este señor nuevo director o la directora antigua o el que venga, podrían en televisión pública, adoptar o darle el espacio a un programa de humor donde se burlara el gobierno de turno. ¿Podría la televisión nacional como canal público adoptar un programa de humor donde se hiciera humor político sobre el gobierno de turno? Humor cáustico donde al presidente Boric le dijera merluzo.

Es que ese es punto para ti el humor tiene que ser corrosivo.

Tiene que ser corrosivo, porque es la esencia del humor.

Porque es la esencia del humor político. ¿Eso es para ti el humor político?

«El humor te provoca, así como la tragedia. El humor político sí tiene que ser súper corrosivo. En general, así como Ricky Gervais le dice «baldies» a los peladitos que hace bromas con niños con leucemia. El humor tiene que ir explorar ese límite. ¿Me entiendes? Es incomodísimo».

¿Kike Morandé debería seguir existiendo?

«Para mí no, porque lo encuentro como el culo de mal».

«Para mi sí. Pero tú estás hablando de una cosa de calidad de televisión. Pero yo siento que debería existir. Yo encuentro terrible que se burlen de un enano ¿Pero por qué no debería existir?».

¿Y las gatitas de Porcel debería existir?.

«Es que es un humor ñoño. Pero de repente tuve a Francella que repiten esos sketch que hacía Francella. Yo de verdad siento que hay un límite que tiene que ver con la calidad. Si tú me preguntas específicamente lo que nosotros estamos haciendo ahora, tú dices que pobre. Si es humilde de menos a más. En la medida en que vayamos rescatando el vestuario, el programa anterior».

Ahora otra de las cosas también que que es a raíz justamente del The Clinic que leí una nota del The Clinic hoy día en una nota de lo que estabas haciendo y esto de hacer humor corrosivo, sí te va a traer o no más incomodidades. Y eran 48 párrafos sobre la historia de la sobre la violencia intrafamiliar. La acusación que tu ex mujer hizo de ti hace dos años.

«Eso me pareció muy flojo, si yo si fuera el periodista o la periodista que hizo eso, me informaría que ha pasado en estos dos años. Como actor he tenido vida, he hecho cinco películas, cuatro series, he estado fuera de Chile haciendo cosas. Eso es flojera. Yo me congelé en el tiempo, igual estoy criogenizado también».

Te mandaste una cagada. Eso es un hecho, Lo has dicho tú literalmente así. Yo estoy citándote a ti años atrás te lo van a sacar los próximos 25 años

«Por flojera mental, por mala onda también. Seamos honestos, o sea yo nunca voy a ser otra persona. No, error».

¿A ti te da lata hablar del tema?

«No, no me da lata hablar del tema. Podría hablar horas sobre el tema para hablar en serio sobre el tema».

Luis Gnecco: ¿Qué es lo que te da lata?

¿Qué sabes lo que pasa? Es como claro, un trampolín, Este el Luis Gnecco, el actor que tuvo figuración por un caso de violencia intrafamiliar. O sea, no voy a hacer nada nunca más. Entonces me voy para la casa. Mejor no hago nada más. Insisto, eso se llama flojera. Y no quiero ser como nuestro presidente que les da lineamiento a la prensa. Y por ahí si me pongo medio paranoico, mala onda.

¿Pero ahora a ti no te llaman para las teleseries?

«No me llaman para teleserie por dos razones. Esto fue una causal de alejamiento. Le debo plata al grifo de la esquina, estuve un año sin pega. Con obligaciones paternales, digamos. Después de un año, yo sabía que tenía que pasar el chaparrón. Nunca consideré que iba a ser tan heavy. Me gasté los pocos ahorros que tenía, pedí plata y afortunadamente trabajo fuera de Chile. Efectivamente, en Chile no hay mucha pega. Lo que dice la Amparo Noguera, después de estar en el escenario promulgando los artículos de la nueva Constitución. Ni Moisés fue tan entusiasta con las tablas de la ley como los actores arriba del escenario. Y ahí están todos quejándose que la cultura. Pero parece que se dieron cuenta que la cultura no es un una prioridad. Y hay muy poco, porque efectivamente, como dice Amparito, ahí hay un canal que hace teleserie y las teleseries no dan para todos».

¿Está decepcionado con el gobierno de Boric?

«Absolutamente. Una decepción. Creo que le ha costado mucho aterrizar. Siempre lo he dicho los cabros, que el 2011 estaban con uniforme y el 2021 están en La Moneda. Creo que es un poquito abrupto. Obviamente les iba a costar aterrizar. Siento que hemos perdido tiempo. Específicamente lo que a mí me toca, que es lo cultural, nunca quise vivir ese fluvio. Entiendo que muchos colegas hayan vivido ese fluido como el sueño. Yo siempre fui mucho más, creo yo, por ser más viejo también un poquito más aterrizado. Nunca pensé que esto fuera a ser. Creo que esto yo lo caché después de la campaña del Sí y el No, el año de la corneta. O sea, obviamente los actores somos oye, oye, Lucho, queremos aprovechar que eres actor conocido para promocionar esta nueva campaña política. Por supuesto. Nunca llega nada».

Ósea te usan y te botan

«Obviamente. Y eso no es victimizarse ni nada, pero es así. Y los actores que lo cachan, bien y los que no, no» cerró diciendo en entrevista con La Radio del Rock, el actor Luis Gnecco.


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