El Premio Nacional de Historia, Gabriel Salazar en conjunto con la actriz Nelda Muray publicaron un libro dedicado a la figura de Luis Emilio Recabarren. “Recabarren: Drama Político”. La obra, que marca un giro en lo que ha publicado el docente de la Universidad de Chile, relata a modo de obra dramática la historia del fundador del Partido Comunista en Chile, haciendo especial foco entre los años 1911 y 1924. Periodo de discusión constitucional y traiciones políticas. Conversamos con el profesor, historiador, filósofo y sociólogo hoy en Palabra Que Es Noticia.
¿Por qué Recabarren y este periodo tan particular (1907-1924)?
“Los partidos políticos estuvieron en un periodo de apertura a un proceso constituyente para realizar una asamblea libremente electa. Similar a lo actual, hubo un rechazo y una enorme actividad deliberativa, que comprendía profesores, conventilleros, militares estudiantes, en el sentido de cambiar toda la estructura socioeconómica del país. Y en ese periodo la persona que orientó a la sociedad fue Recabarren, con un proyecto constitucional hecho desde abajo, porque es el único intelectual orgánico que ha tenido el pueblo chileno”, señala Gabriel Salazar.
“Ese periodo remató en una doble traición. La de Alessandri, cuando el ejercito tenía un proyecto revolucionario y estaba de acuerdo con el pueblo chileno y Alessandri no acepta el acuerdo y lo traiciona. Luego la traición de Carlos Ibañez del Campo, sobre el proyecto revolucionario de los oficiales jóvenes que provocó el cambio y donde él participó, pero después al llegar al poder, el general se convierte en un caudillo personalista y se olvidó del proyecto de los oficiales jóvenes y del proyecto de los trabajadores”, indica el historiador, filósofo, sociólogo y docente.
¿Explíquenos, en 1925 Alessandri hace un gran consejo y a puertas cerradas escriben la constitución, es similar a lo que pasa ahora, un fracaso?
“Uno desarrolla esos procesos, donde no se ven a lo largo de la historia porque los periodistas no los tocan. Los periodistas trabajan el tiempo corto y yo trabajo en otro plano, donde se da la situación real de un proceso constituyente. La gente quiere cambiar algo pero no sabe cómo, por eso los políticos corrieron el 15 de noviembre para darle una salida a esto, permitieron que los independientes eligiera diputados para la ocasión”, afirma Gabriel Salazar.
“El problema de los procesos profundos, en el corto plazo es que la manejan los políticos y no el pueblo, la Lista del Pueblo no tenia pasado, no tenía trayectoria y fue de último momento, que por lo demás se fue disolviendo”, asegura el historiador, filósofo, sociólogo y docente.
¿Por qué se dan personas como Recabarren cada cierto tiempo?
“Es difícil traducir los tiempos, porque pierden el control de los lideres que se eligen, tal como los pingüinos que ahora son clase política y gobierno. Lo que ayuda es el pensamiento político, Recabarren ha sido el único de recoger el pensamiento del pueblo y transformarlo en políticas, a través de los periódicos, conferencias, fue trabajando desde dentro del pueblo y dialécticamente”, sostiene Gabriel Salazar.
“Todos los demás partidos, incluyendo los que él fundó, es que se han nutrido de ideologías extranjeras, la izquierda por ejemplo tiene esa influencia”, puntualiza el historiador, filósofo, sociólogo y docente.
¿Qué pasa con el narco, cuál es el movimiento popular profundo?
“Está constituido por el empleo precario que es más constante que el empleo permanente lo que produce un daño en lo mental. Toda gente sabe muy bien lo que no quiere, pero no sabe cómo salir de esas situaciones. Hoy el fenómeno más importante es que el 98% de los chilenos rechaza a los políticos”, explica Gabriel Salazar.
“Las encuestas del CEP reflejan un 99% de rechazo hacia los representantes políticos. ¿Quién los va a representar ahora? Hay que auto representarse y los políticos quieren hoy cerrar el proceso constituyente, pero eso lo determina la ciudadanía y no hay ninguna solución para sus problemas”, comenta el historiador, filósofo, sociólogo y docente.
“El problema del empleo es igual al que tuvimos en el siglo XIX, considerado por los analistas como un sistema neo esclavista y el problema es que cada vez que el pueblo se ha levantado para cambiar eso ha perdido. Ha habido 11 intentos y será un fracaso también porque no resuelve nada”, fundamenta Gabriel Salazar.
“Las propuestas constitucionales no hablan de empleo y el problema sigue replicándose”, complementa el historiador, filósofo, sociólogo y docente de la Universidad de Chile.
¿Qué le parece la propuesta de ahora?
“Este se caracteriza porque es un elixir para políticos, pero es un trago amargo para nosotros, bien escrito desde el derecho, pero es un dialogo cerrado, donde la descripción de las estructuras burocráticas del estado se explican, pero en la población, no es pensado para resolver ninguno de los 15 problemas que por 200 años este país arrastra. No es una estructura que nos vaya a solucionar los problemas”, concluye en Palabra Que Es Noticia Gabriel Salazar.