La cuenta regresiva para Kiss ya comenzó. La banda llega a su fin este año tras unas largas y explosivas cuatro décadas de historia, lo que tiene a sus miembros viviendo momentos muy emocionales.
En este contexto, mirar al pasado es casi inevitable. Y más en el caso de un grupo tan grande como el liderado por Paul Stanley y Gene Simmons, que marcó huella en todos los lugares que visitaron, dejando incontables recuerdos en los fans.
Sin embargo, los propios músicos deben tener los suyos, o así lo dejó claro el propio Simmons, quien en una nueva entrevista eligió aquel único momento en la historia de Kiss que le gustaría revivir, si pudiera.
El debut de Kiss en un escenario
«Yo elegiría el principio. La primera vez que nos subimos al escenario, en la Nochevieja de 1973 en Nueva York. El corazón me latía como nunca. Hay que entender que, cuando vienes de las entrañas de la gente, de la calle, y ves a esas figuras divinas en el escenario pasándoselo como nunca», señaló.
Gene hace hincapié en el hecho de que nunca fue el hombre más atractivo, pero «en cuanto empiezas a rasguear la guitarra y, por supuesto, a sacar mi prodigioso apéndice oral, ¡boom!».
Aquella primera vez fue también cuando Kiss compartió escenario con Iggy Pop y Blue Öyster Cult, pero lo que no saben muchos es que también fue la primera en la que el bajista que se prendió fuego accidentalmente en el escenario:
«Fue un mes antes de que saliera el primer disco, nadie sabía quiénes éramos. Así que salimos. Es la tercera canción que hacemos, Firehouse. Es hora de escupir llamas. Me prendo fuego enseguida. El público se vuelve loco», recordó.
Desde aquella actuación, Simmons disfruta viviendo el estilo de vida de una estrella del rock, como explicó en conversación con el británico Piers Morgan: «Es una tontería. ¿Te gustaría tener más dinero del que sabes qué hacer y que te adorasen más? Ah, olvidaba que eres Piers Morgan, eso lo recibes todos los días», indicó.