En una entrevista reciente en el podcast de Robb Flynn, Scott Ian rememora haber estado presente durante algunos ensayos de Metallica en Nueva York poco después de la expulsión de Dave Mustaine.
“Todos ellos bebían, pero Dave bebía más que ellos”, recuerda Scott. “La diferencia es que todos se curaban y eran graciosos, mientras que Dave se volvía el tipo de ebrio no gracioso. Todos conocemos uno de esos. Creo que ese fue básicamente el comienzo del fin, porque vivían todos juntos en el estudio y estaban en lugares cercanos, y creo que se preguntaron, “¿cómo diablos vamos a seguir haciendo esto y avanzar si vamos a estar constantemente preocupándonos por esto?”.
“Recuerdo encontrarme con Cliff”, continúa Scott, “le pregunté, ‘¿qué onda?’ Y me dijo, ‘no mucho, echamos a Mustaine. Está en un bus de vuelta a Bay Area’”. Hasta ese punto, el guitarrista de Anthrax pensaba que le estaban tomando el pelo, pero se acercó a preguntarle al resto de la banda. Recuerda que Lars Ulrich le respondió que lo hicieron, “está a 5 horas de acá de camino a California. Viene para acá un tipo que conocemos de la banda Exodus. Llegará mañana”.
De acuerdo a lo que recuerda Scott, Mustaine era el foco de Metallica. “La gente no sabe, pero James aún no era James. La primera vez que conocí a James, él tomaba y cambiaba, pero era un tipo tímido y callado (…) Dave era el frontman. Tenía la actitud y la personalidad”. En ese momento, Ian les preguntó a los miembros de la banda si estaban tomando la mejor decisión, a lo que ellos le respondieron que “teníamos que hacerlo, no podíamos lidiar más con él. Nos estaba metiendo en problemas”.
Finalmente, Scott Ian concluye que “ya era suficientemente difícil vivir en el piso de un edificio. Lidiar con tus propios problemas y, además, con los de otra persona… Lo entiendo. Tenía que pasar en un momento. He estado ahí, haciendo cambios personales en mi banda. Lo entiendo. A veces es lo peor que puedes hacer, pero para poder dar el próximo paso, tienes que hacerlo”.