Entre las armas a la venta, se encontraba la utilizada por el estudiante, considerada como «el arma de los estadounidenses»
El 14 de febrero, Marjory Stoneman Douglas High School perdió a 17 de su estudiantes tras tiroteo efectuado por Nikolas Cruz, ex alumno de este establecimiento que, con un fusil semi-automático AR-15, marcó un antes y un después en aquella comunidad estudiantil.
Sin duda, el caso de la matanza de Parkland no dejó indiferente a nadie, por la firaldad con la que le acusado realizó los disparos con esta arma de guerra.
Independiente de esto, después de tres días y a una hora en auto del lugar de tal tragedia, se realizó el Florida Gun Show, un concurrido espectáculos de armas donde se podían encontrar rifles, pistolas, escopetas, municiones y todo un arsenal para la venta, distribuidas en una feria de 600 puestos para el público, entre los que habían niños, que examinaban la potencia de cada una.
Ante la indignación y molestia por parte de personas que transitaban por fuera de este evento, los cuales no podían creer que se realizara a tan pocos días de una tragedia nacional, Jorge Fernandez habló en nombre de Florida Gun Shows y expresó sus “más profundas condolencias a las personas que han estado involucradas en esta terrible tragedia”. Pero justificó la feria de su compañía porque son actividades programadas con años de anticipación y “simplemente sería prohibitivamente costoso cancelar”.
