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ESPECIAL // 10 curiosidades de la portada de «Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band» de The Beatles

Festejamos el aniversario 50 de esta obra maestra.

Una cosa es que un disco aparezca y se inserte en la cultura de manera tan profunda que nada se sienta igual después de su llegada, pero ¿cuáles son las posibilidades de que el mismo álbum tenga la portada más icónica de todos los tiempos?

Es el caso de «Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band» de los Beatles y su maravilloso espiral de imágenes, que van del ensamble más famoso de personalidades en la tapa, cortesía de los artistas pop Peter Blake y Jann Haworth, hasta el arte del libro interior hecho por el equipo de diseño holandés The Fool, pasando por las fotografías de Michael Cooper, y la bolsa de sorpresas de tesoros para recortar que acompañó al disco.

Robert Fraser supervisó el proceso en su rol de director artístico, y la fotografía de tapa más legendaria de la historia del rock se produjo hace 50 años, el 30 de marzo. La tapa fue magníficamente costosa de producir, pero solidificó el estatuto mítico de los Beatles para siempre.

Rescatamos un especial de Rolling Stone con 10 curiosidades que puede que no sepas acerca de la estética icónica de «Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band»…

1. PAUL MCCARTNEY LIDERÓ EL CONCEPTO DE LA PORTADA

Esta era una época en la que McCartney se estaba afianzado cada vez más a la hora de tomar las decisiones de carrera de los Beatles, una tendencia que continuaría por todo el resto de su tiempo juntos. Produjo dibujos en tinta del concepto de la tapa y los compartió con Blake y su esposa, Haworth. «Hice muchos dibujos de nosotros siendo presentados ante el Alcalde», explicó Paul en «Many Years From Now», de Barry Miles, «con muchos dignatarios y muchos amigos nuestros alrededor, e íbamos a ser nosotros frente a un gran reloj floral, e íbamos a aparecer como una brass band. Eso evolucionó y se transformó en la tapa de Peter Blake.»

2. PERO QUIZÁS SE HAYA INSPIRADO EN UN DESCONOCIDO GRUPO SUECO

Un EP parodia/homenaje a los Beatles aparecido tres años antes que «Sgt. Pepper», de la brass band sueca Mercblecket, contaba con una portada sorprendentemente similar a la final de Pepper. McCartney no declaró oficialmente acerca de la imagen anterior, pero los Mercblecket conocieron a los Beatles luego de su llegada a Estocolmo en 1964, y según Jorge Johansson, un productor discográfico sueco, Roger Wallis, miembro de la banda, dice haberle dado a McCartney una copia del EP durante el viaje.

3. LA PORTADA CASI FUE UNA PINTURA ABSTRACTA

John Dunbar, un amigo de McCartney, se entusiasmó con la idea de que una pintura abstracta, sin ningún texto, funcionaría mejor en aquellos años vertiginosos: «¡La gente va a saber lo que es!», señaló. Los Beatles también iban a colocarse en una sala eduardiana en medio de viejos trofeos y fotografías. El atractivo de Blake era que su arte era pionero en un sentido moderno, pero con elementos del pasado, y los Beatles querían que «Sgt. Pepper» atrajera tanto a adolescentes como a octogenarios. También era fan de Gene Vincent y Elvis, un «gran común denominador» para McCartney.

4. JOHN LENNON ERA EL BEATLE MÁS PROBLEMÁTICO EN CUANTO A QUIÉN QUERÍA QUE ESTUVIERA EN LA PORTADA

Cada miembro de los Beatles recibió la tarea de pensar una lista de hombres y mujeres de la historia que ellos querían que se les sumaran en el gran festín imaginativo de la tapa del disco. En total hay 57 fotos en el collage. Lennon, queriendo ser «audaz y llamativo», en palabras de McCartney, votó por que aparecieran Hitler y Jesucristo, y también Gandhi. Sir Joseph Lockwood, jefe de EMI, vetó la inclusión de Gandhi, preocupado de que el disco no se vendiera en India. Pero Aleister Crowley, el oculista y satanista, logró quedar en la lista.

5. HUBO DIVERSAS REACCIONES POR PARTE DE LAS CELEBRIDADES QUE LOS BEATLES QUERÍAN INCLUIR

La actriz Mae West, después de enterarse del pedido de los Beatles, dijo: «¿Qué haría yo en una banda de corazones solitarios?». Shirley Temple quería escuchar el disco antes de comprometerse. Blake consideraba que el collage era un «diseño teatral», y su idea era que la banda de ficción acababa de ofrecer un concierto en el parque, y ahora estaban tomándose una foto con su público. Leo Gorcey, protagonista en las películas de Bowery Boys, quería 400 dólares por su imagen, y así quedó fuera de la lista.

6. FUE EL PRIMER DISCO CON LETRAS IMPRESAS, LO CUAL AYUDÓ A INSPIRAR LOS RUMORES DE QUE «PAUL ESTABA MUERTO»

Las letras aparecieron en la contratapa, lo cual colaboró con la propagación del rumor de que «Paul estaba muerto», que empezó a circular al poco tiempo. En el reverso, McCartney le da la espalda a la cámara, y junto a su cabeza se lee «without you» [sin ti], de «Within You Without You», de George Harrison. Se decía que había «pistas» desperdigadas por todo el arte del disco: con el arreglo floral en la tapa, por ejemplo, y la placa de O.P.D. que lleva McCartney, del cual John Neary, en un artículo de «Life», dijo que era el equivalente británico de «muerto al llegar». En el mismo artículo, McCartney dijo: «Es todo tan estúpido. Agarré esa placa de O.P.D. en Canadá. Era una placa policial.» De hecho, las iniciales refieren a la Ontario Provincial Police, y la segunda P se confundió con una D.

7. LA MITAD DE LOS BEATLES APARECIERON DROGADOS EN LA SESIÓN FOTOGRÁFICA DEL 30 DE MARZO

La banda esa noche iba a grabar, y llegó al estudio fotográfico londinense de Michael Cooper por la tarde. El collage de Blake y Haworth ya se había ensamblado durante la semana anterior. «Si miras la portada de cerca, vas a ver a dos personas volando, y dos que no», dijo John Lennon, y Ringo Starr agregó: «¡Mírala y saca tu propia conclusión! ¡Hay muchas fotos con ojos rojos!». Para aumentar el carácter volado estaba el diseño plegable de The Fool, el colectivo holandés que Fraser no quería que participara, diciéndole a McCartney que su contribución era una pintura mala. The Fool sí hizo la funda del disco, que reemplazó al habitual sobre blanco de papel que venía con casi cualquier otro disco de la época.

8. NINGUNA PORTADA DE DISCO HABÍA COSTADO TANTO

«Originalmente, queríamos un sobre con regalos, pero se volvió demasiado difícil de producir», recordó McCartney. «De todos modos, fue bastante difícil, y la compañía discográfica se la tuvo que bancar, porque estaba costando más de las habituales tapas de cartón.» La producción de mayoría de las tapas de discos era de 50 libras; esta obra de los Beatles/Blake/Haworth superó las 3.000. Mucho tuvo que ver con pagarle a la gente para usar su imagen, que hasta entonces había rara vez sido un factor para la tapa de un disco de rock.

9. EL DISCO VENÍA CON SUS PROPIAS FIGURAS RECORTABLES

«Había pequeños folletos, pequeños papeles», dijo McCartney. Estos incluían bigotes de papel, una postal de una estatua de la casa de Lennon, y bandas de sargento de papel. La idea era que el disco debía ser una experiencia interactiva entre la banda y los oyentes. La elección de cortes de pelo y vellos faciales estilo hippie supuestamente debía mezclarse con sus trajes militares anticuados, para relacionar el pasado, el presente y el futuro. «Queríamos que todo Pepper fuera algo cuya tapa pudieras mirar durante años», dijo McCartney.

10. ORIGINALMENTE, ELVIS IBA A APARECER EN LA PORTADA

En una portada con Bob Dylan y una referencia a los Rolling Stones, la ausencia de Elvis Aaron Presley, héroe colectivo de los Beatles, es bastante llamativa. Cuenta McCartney: «Elvis era demasiado importante, y estaba demasiado por encima del resto como para incluso mencionarlo». Así, entonces, afuera Elvis, y adentro Bobby Breen, un famoso cantante infantil canadiense de los años 30. Breen encontró sorprendente su inclusión. No se sabe lo que pensó Elvis acerca de su omisión.

La encarnación anterior de los Beatles, de alrededor de 1964, está representada por cuatro figuras de cera cortesía de Madame Tussaud, quien les prestó las piezas a la banda. Más tarde, desaparecerían en el almacén de Tussaud, y permanecieron ocultas durante 20 años antes de ser subastadas por Cooper Owen por 81.500 libras en 2005. «Uno pensaría que nadie querría pagar tanto dinero por unos pedazos de cera», bromeó Louise Cooper, de Cooper Owen.


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