El músico acaba de publicar su nuevo disco con Smashing Pumpkins.
Acaba de salir el nuevo álbum de Smashing Pumpkins, “Monuments to an elegy”, y como parte de su promoción, Billy Corgan ha salido a hablar de todo. En una reciente entrevista con Howard Stern, fue consultado sobre el trabajo de algunos colegas, como Pearl Jam y Foo Fighters, para quienes tuvo palabras sorprendentes.
El calvo músico dijo sobre Pearl Jam: “Me parecen poco originales y su obra habla por ellos. Sé que tienen una base de fans tremenda y está bien, son una gran banda, pero yo soy de The Beatles, los Stones y los Kinks, si ves lo que han hecho muchas de esas bandas, (Pearl Jam) simplemente no tienen la obra (como para estar a ese nivel)”.
“No creo que tengan las canciones”, añadió, “si juntas mis canciones con las de Cobain, al lado de las de ellos, no tienen las canciones”. Además afirmó que le parece “un misterio” el éxito que han cosechado y que “la gente interpretará esto de manera equivocada, pero hablando competitivamente, son mis competidores y debo decir contra quien compito y por qué”.
También se distanció de Eddie Vedder, de quien dijo: “No he socializado con él desde hace bastante, pero creo que mucha gente se transforma por la fama. Conocía a una persona y luego hay otra. Yo soy otra persona, así que quizá él piense lo mismo de mí, no se le puede culpar. Salió en la portada de la revista Time, yo no, y ha lidiado con un nivel de fama con el que yo nunca he tenido que lidiar, así que no puedo decir cómo sienta eso”.
Foo Fighters, por su parte, también fue blanco de sus palabras, a propósito del reciente lanzamiento de “Sonic Highways”: “Dave (Grohl) es un gran músico, un gran compositor y ha hecho su obra. Mi crítica a los Foo Fighters, si tuviese que hacer de crítico musical, es que no han evolucionado. Y eso es lo que los envuelve ahora, hacen la misma música”.
“Monuments to an elegy” de Smashing Pumpkins salió el 9 de diciembre y representa una nueva incursión de Corgan funcionando bajo el nombre de su banda, esta vez con el baterista Tommy Lee (Mötley Crüe) como invitado. Es el disco que los trae de vuelta a Chile, como parte del festival Lollapalooza en marzo.